En el 2010 el país gastó 698.000 millones de yuanes en la investigación y el desarrollo, aumentando en un 20,3% sobre el año anterior, cifra que representa el 1,75% del PIB, incluidos 32.800 millones de yuanes para la investigación en ciencias básicas. A lo largo del año, el Estado dispuso 326 temas para el Programa Nacional de Apoyo de la Ciencia y Tecnología y 308 temas para el Programa Marzo de 1986. En términos acumulativos se construyeron 127 centros estatales para la investigación de ingeniería y 91 laboratorios de ingeniería estatales. Los centros tecnológicos de las empresas reconocidos por el Estado aumentaron a 729 y los de nivel provincial a 5.532. Con la ejecución del Programa de Inversión para la Creación de Empresas de las Industrias Emergentes, se apoyó el establecimiento de un total de 20 empresas inversoras para la creación de empresas, así como la inversión en la creación de 46 empresas. Se atendieron 1.222.000 solicitudes de patentes nacionales y extranjeras, incluyendo 1.084.000 nacionales, el 88,7%; se dio vista a 391.000 solicitudes de patentes de invención nacionales y extranjeras, incluyendo 281.000 nacionales, el 71,9%; se autorizaron 815.000 patentes, incluyendo 719.000 nacionales, el 88,2%, y se autorizaron 135.000 patentes de invención, incluyendo 74.000 nacionales, el 54,8%. Al cierre del 2010 existían 2.216.000 patentes válidas, incluyendo 1.732.000 nacionales, el 78,2%, así como 565.000 patentes de invención válidas, incluyendo 230.000 nacionales, el 40,7%. En el 2010 se firmaron 230.000 contratos tecnológicos, por un valor pactado de 390.600 millones de yuanes, aumentando en 28,5% en relación al año previo. En el año se realizaron con éxito 15 lanzamientos de satélites. Se lanzó exitosamente el satélite chino Chang E II.

        A finales del año, China disponía de 27.000 laboratorios de examen de productos, incluidos 443 centros de nivel estatal para este propósito. A lo ancho del país funcionaban 171 organismos de certificación de calidad y sistema de productos, los cuales cumplieron de forma acumulativa la certificación de los productos de 79.850 empresas. El país tenía en total 3.309 organismos de tecnología de medida y peso legales, los cuales examinaron de manera coercitiva 44,67 millones de instrumentos en el año. En el 2010 se elaboraron y revisaron 2.860 estándares estatales, incluyendo la elaboración de 2.123 nuevos. A lo largo del año, la Estación Meteorológica Central y las estaciones de nivel provincial emitieron en total 5.149 advertencias y 6.559 alarmas. En el país funcionaban 1.477 observatorios o estaciones sismológicas y 32 redes de observatorios de telemetría sísmica, así como 71 estaciones de observación marítima. Los departamentos de cartografía editaron públicamente 1.944 mapas y 806 libros de cartografía.

        En 2010, China hizo muchos avances históricos en la investigación científica y tecnológica y consiguió ser números uno del mundo en una serie de aspectos:

        El l de octubre, el exitoso lanzamiento al espacio del satélite Chang E II descorrió el telón de la segunda etapa del programa chino de exploración de la Luna.

        Gracias a su sobresaliente funcionamiento, la supercomputadora Tianhe I, desarrollada por la China propia, batió el récord mundial de operaciones por una máquina similar, lo cual marca que el país ha realizado avances históricos en el nivel tecnológico integral de desarrollo independiente de supercomputadoras.

        El tren de alta velocidad de nueva generación desarrollado por la China propia alcanzó la velocidad de 486 km por hora, implantando la velocidad más elevada del experimento de operación ferroviaria en el mundo.

        El 8 de julio de 2010 entró en funcionamiento satisfactoriamente el proyecto demostrativo de transmisión de corriente continua de voltaje extra alto Xiangjiaba-Shanghai, el cual, desarrollado por la China propia, es una obra de más alta tensión eléctrica, mayor volumen de transmisión, mayor distancia de transmisión eléctrica y nivel tecnológico más avanzado en el mundo.

        El Jiaolong, primer sumergible tripulado de mar profundo diseñado y desarrollado de manera integrada por la China propia, culminó con éxito el experimento marítimo de clase de 3.000 metros de profundidad y su mayor sumergimiento fue de 3.759 metros. Esto indica que China se ha convertido en el quinto país en dominar la tecnología de sumergimiento tripulado de 3.500 ó más metros después de Estados Unidos, Francia, Rusia y Japón.

        El 12 de diciembre entró en funcionamiento formalmente el Laboratorio Subterráneo Jinping, instalado en la Central Hidroeléctrica Jinping sobre el río Yalongjiang, provincia de Sichuan. Con una cobertura de rocas verticales de 2.400 metros de profundidad, es el laboratorio subterráneo más profundo bajo rocas en el mundo. Su entrega al uso marca que China ya posee una plataforma de experimento bajo tierra propia para desarrollar investigaciones importantes en ciencias básicas y en tecnologías de vanguardia.